Que es la Eutonia
La eutonía es una disciplina psico-corporal creada por Gerda Alexander basada en la experiencia del propio cuerpo. Conduce a la persona hacia una toma de conciencia de sí misma y propone un aprendizaje para la regulación del tono muscular, adecuándolo a cualquier situación de la vida.
El término eutonía, proviene del griego Eu: bueno, óptimo - y del latín Tonus: tensión, el grado de tensión o elasticidad de nuestras fibras musculares. El término fue acuñado para expresar la idea de una "tonicidad armoniosamente equilibrada en adaptación constante al estado o actividad del momento".
El término eutonía, proviene del griego Eu: bueno, óptimo - y del latín Tonus: tensión, el grado de tensión o elasticidad de nuestras fibras musculares. El término fue acuñado para expresar la idea de una "tonicidad armoniosamente equilibrada en adaptación constante al estado o actividad del momento".
1 Eutonía y tono muscular
2 Orígenes de la Eutonía
3 La práctica de la Eutonía
4 Principios de la Eutonía
5 La Eutonía en América Latina
6 Enlaces externos
Eutonía y tono muscular
La eutonía como disciplina utiliza el conocimiento del propio cuerpo como herramienta para la adquisición un uso adecuado de sus estructuras y la posibilidad de
fluir entre niveles de tensión óptima (entendidos como los apropiados a las necesidades del individuo para enfrentar las actividades de su vida cotidiana). Existe un componente de la tensión de la musculatura que tiene un carácter inconsciente para la mayor parte de las personas.
El “buen” tono muscular, propio del estado eutónico es el que proporciona flexibilidad y adaptabilidad. Por el contrario encontrarse “distónico” es permanecer en en un estado de excesiva tensión (hiper-tono) o de uno muy bajo que con la sensación de pesadez o falta de fuerza en el cuerpo (hipo-tono), o bien la imposibilidad de fluctuar fuera de un normo-tono en diversas situaciones.
Toda alteración en la tonicidad muscular genera alteraciones en los controles automáticos del sistema vegetativo, el cual regula la circulación, el metabolismo, el sistema glandular y las funciones de todos los órganos y sistemas del cuerpo. Todo trastorno físico tiene repercusiones psíquicas y viceversa. Se puede comprender así que actuando sobre la tonicidad se puede influir sobre todo el ser humano.
Orígenes de la Eutonía
La eutonía como disciplina surge a partir de la experiencia personal e iniciativa de Gerda Alexander. De joven contrajo fiebre reumática y endocarditis, sufriendo varias crisis. Esto la obligó precozmente a crear formas de movimiento que no compliquen sus afecciones. Pasó largos períodos de reposo, que la estimularon para indagar en sí misma buscando una forma de movimiento más "económica" y espontánea, a partir del aprendizaje de la regulación tónica para lograr mayor bienestar. Gerda postulaba que "es preciso aprender cada día un poco más que somos ese cuerpo en el cual podemos apoyarnos". Por medio de la observación y reflexión sobre sus alumnos, sus propias dolencias y dificultades en la movilidad, y la investigación sobre los basamentos neuro-psicológicos de los movimientos del ser humano, fue dando forma a su propio método.
En el origen, el trabajo personal de Gerda Alexander en el área de las artes del movimiento tenía la premisa de lograr la posibilidad de expresarse sin modelos preestablecidos que interfieran en las posibilidades funcionales y creativas. En esa época esta intención era denominada: "la búsqueda del movimiento espontáneo". En su investigación, hasta concretar lo que posteriormente llamará Eutonía, pasaron aproximadamente 30 años.
El desarrollo de la Eutonía como disciplina, se nutre de múltiples antecedentes que configuran un universo de teorías y prácticas que se han resignificado y desarrollado en el campo de la Eutonía. Representa una síntesis en su forma de comprender de manera integrada integrando los aspectos psiquícos y corporales del ser humano. Es una disciplina que posee, por un lado, una especificidad pedagógica: ya que busca la adaptabilidad del tono muscular a los cambiantes estímulos interiores y exteriores, a partir de la enseñanza y aprendizaje del desarrollo de la sensibilidad y de la auto-observación, a fin de expandir la conciencia sobre el funcionamiento corporal y la interacción constante de este con los estímulos externos (temperatura ambiente, la presencia de otras personas, etc.) e internos (pensamientos, emociones, etc.); y por el otro, contiene una especificidad psico-corporal basada en la experiencia del propio cuerpo, que conduce a la persona hacia una toma de conciencia de sí misma, desarrollando los recursos que todo individuo tiene para alcanzar el equilibrio psicofísico. El tono muscular, vegetativo y el estado psicológico son los puntos de observación y de impacto de todas las experiencias de la práctica de la Eutonía.
La práctica de la Eutonía
La transmisión de la eutonía tiene lugar en clases grupales o sesiones individuales. El eutonista acompaña al estudiante en un proceso de reconocimiento y exploración personal, tratando evitar el interferir o influir dicho proceso, fomentando a su vez el desarrollo de las potencialidades propias de cada alumno.
Una sesión de eutonía empieza con una fase de "inventario" en las que el estudiante, a través de una series de "posiciones de control" toma consciencia del estado inicial de su tono muscular. Luego por medio de varias actividades físicas guiadas por el eutonista, que puede incluir el uso de objetos (p. ej. pelotas, palos, almohadas) o el contacto entre el eutonista y el estudiante, el último aumenta su conciencia con respecto a diferentes "principios" de la eutonía (vea abajo). Al final de la clase o la sesión pueden ser repetidas las posiciones de control iniciales para permitir constatar las diferencias en los estados y la conciencia de los mismos.
La práctica de eutonía conduce a una mejor autocomprensión, incrementando las capacidades cognitivas y emocionales, la armonía y la posibilidad de estar atentos.
Al desarrollarse la capacidad de observarse, aceptando lo que ocurre sin juzgarse, el individuo se convierte en testigo de sus propias acciones y de su propia vida. Al ser un observador más agudo, desprejuiciado, le permite llegar a un conocimiento más profundo de sí y del otro.
Principios de la Eutonía
Los principios constituyen herramientas metodológicas para ser utilizadas en las clases o sesiones que posibilitan al alumno recuperar la fluctuación del tono.
Tales principios son:
toma de conciencia de la piel
toma de conciencia del espacio interno del cuerpo
toma de conciencia de los huesos
el contacto consciente (conciencia del espacio magnético que rodea al individuo)
experiencia del transporte (reflejo consciente del enderezamiento)
"repousser" (rechazar-empujar)
movimientos activos y pasivos
micromovimientos (movimientos de descompresión articular)
posiciones de control (secuencias de movimientos que permiten evaluar el estado de flexibilidad muscular)
movimiento eutónico
vibraciones (vocales y óseas)
La eutonía propicia la toma de conciencia y la regulación de la función tónica, a través del desarrollo del individuo como auto-observador. Se vuelve posible entonces detectar fijaciones en zonas que perdieron la capacidad de fluctuar en su tensión de base.
La Eutonía en América Latina
La propia Gerda Alexander introduce la disciplina en América Latina por medio de dos viajes que realiza a Buenos Aires en la década del '70, en los que brinda diversos seminarios y conferencias. Entre los participantes en esta experiencia se encuentra Berta Vishnivetz que se traslada a Dinamarca para continuar su aprendizaje con Gerda. Se gradúa allí en 1974, además de obtener títulos de magister y doctora en psicología mientras se desempeña como colaboradora de Gerda.
Berta Vishnivetz alterna su permanencia en Dinamarca con la dirección de la Escuela Latinoamericana y Argentina de Eutonía, que funciona simultáneamente en Buenos Aires (Argentina) y San Paulo (Brasil). Realiza en ambos países varias formaciones de eutonistas, las cuáles a pesar de desarrollarse en el ámbito no oficial obtienen un reconocimiento social como resultado del esfuerzo de los eutonistas para institucionalizar este campo. En el caso de Argentina en particular, la eutonía logra integrarse de manera diversa en ámbitos como la salud y calidad de vida, el arte y la educación, donde es objeto de estudio en distintas universidad e instituciones de nivel superior.
En el año 2005 comienza su funcionamiento en Buenos Aires una escuela de formación de eutonistas con reconocimiento oficial del Estado, tratándose de la segunda en el mundo con esa característica (después de la escuela alemana).
Alexander, Gerda (1979), La eutonía; Un camino hacia la experiencia total del cuerpo, Buenos Aires: Paidós.
Alexander, Gerda (1981), Eutony; The holistic discovery of the total person, New York: Felix Morrow.
Vishnivetz, Berta (1994), Eutonia; La Educación del Cuerpo hacia el Ser, Buenos Aires / Madrid : Paidós.
Odessky, Alejandro (2002), Eutonía y Stress, Buenos Aires: Lugar Editorial. 950-892-164-1.
Kaplan, Frida (2004), Salud y bienestar a través de la Eutonía (dvd), España - A.C.T.A..
Kaplan, Frida (2006), Embarazo y nacimiento eutónico, Método Frida Kaplan, Buenos Aires: Ediciones B.
Extraido de WP
2 Orígenes de la Eutonía
3 La práctica de la Eutonía
4 Principios de la Eutonía
5 La Eutonía en América Latina
6 Enlaces externos
Eutonía y tono muscular
La eutonía como disciplina utiliza el conocimiento del propio cuerpo como herramienta para la adquisición un uso adecuado de sus estructuras y la posibilidad de
fluir entre niveles de tensión óptima (entendidos como los apropiados a las necesidades del individuo para enfrentar las actividades de su vida cotidiana). Existe un componente de la tensión de la musculatura que tiene un carácter inconsciente para la mayor parte de las personas.
El “buen” tono muscular, propio del estado eutónico es el que proporciona flexibilidad y adaptabilidad. Por el contrario encontrarse “distónico” es permanecer en en un estado de excesiva tensión (hiper-tono) o de uno muy bajo que con la sensación de pesadez o falta de fuerza en el cuerpo (hipo-tono), o bien la imposibilidad de fluctuar fuera de un normo-tono en diversas situaciones.
Toda alteración en la tonicidad muscular genera alteraciones en los controles automáticos del sistema vegetativo, el cual regula la circulación, el metabolismo, el sistema glandular y las funciones de todos los órganos y sistemas del cuerpo. Todo trastorno físico tiene repercusiones psíquicas y viceversa. Se puede comprender así que actuando sobre la tonicidad se puede influir sobre todo el ser humano.
Orígenes de la Eutonía
La eutonía como disciplina surge a partir de la experiencia personal e iniciativa de Gerda Alexander. De joven contrajo fiebre reumática y endocarditis, sufriendo varias crisis. Esto la obligó precozmente a crear formas de movimiento que no compliquen sus afecciones. Pasó largos períodos de reposo, que la estimularon para indagar en sí misma buscando una forma de movimiento más "económica" y espontánea, a partir del aprendizaje de la regulación tónica para lograr mayor bienestar. Gerda postulaba que "es preciso aprender cada día un poco más que somos ese cuerpo en el cual podemos apoyarnos". Por medio de la observación y reflexión sobre sus alumnos, sus propias dolencias y dificultades en la movilidad, y la investigación sobre los basamentos neuro-psicológicos de los movimientos del ser humano, fue dando forma a su propio método.
En el origen, el trabajo personal de Gerda Alexander en el área de las artes del movimiento tenía la premisa de lograr la posibilidad de expresarse sin modelos preestablecidos que interfieran en las posibilidades funcionales y creativas. En esa época esta intención era denominada: "la búsqueda del movimiento espontáneo". En su investigación, hasta concretar lo que posteriormente llamará Eutonía, pasaron aproximadamente 30 años.
El desarrollo de la Eutonía como disciplina, se nutre de múltiples antecedentes que configuran un universo de teorías y prácticas que se han resignificado y desarrollado en el campo de la Eutonía. Representa una síntesis en su forma de comprender de manera integrada integrando los aspectos psiquícos y corporales del ser humano. Es una disciplina que posee, por un lado, una especificidad pedagógica: ya que busca la adaptabilidad del tono muscular a los cambiantes estímulos interiores y exteriores, a partir de la enseñanza y aprendizaje del desarrollo de la sensibilidad y de la auto-observación, a fin de expandir la conciencia sobre el funcionamiento corporal y la interacción constante de este con los estímulos externos (temperatura ambiente, la presencia de otras personas, etc.) e internos (pensamientos, emociones, etc.); y por el otro, contiene una especificidad psico-corporal basada en la experiencia del propio cuerpo, que conduce a la persona hacia una toma de conciencia de sí misma, desarrollando los recursos que todo individuo tiene para alcanzar el equilibrio psicofísico. El tono muscular, vegetativo y el estado psicológico son los puntos de observación y de impacto de todas las experiencias de la práctica de la Eutonía.
La práctica de la Eutonía
La transmisión de la eutonía tiene lugar en clases grupales o sesiones individuales. El eutonista acompaña al estudiante en un proceso de reconocimiento y exploración personal, tratando evitar el interferir o influir dicho proceso, fomentando a su vez el desarrollo de las potencialidades propias de cada alumno.
Una sesión de eutonía empieza con una fase de "inventario" en las que el estudiante, a través de una series de "posiciones de control" toma consciencia del estado inicial de su tono muscular. Luego por medio de varias actividades físicas guiadas por el eutonista, que puede incluir el uso de objetos (p. ej. pelotas, palos, almohadas) o el contacto entre el eutonista y el estudiante, el último aumenta su conciencia con respecto a diferentes "principios" de la eutonía (vea abajo). Al final de la clase o la sesión pueden ser repetidas las posiciones de control iniciales para permitir constatar las diferencias en los estados y la conciencia de los mismos.
La práctica de eutonía conduce a una mejor autocomprensión, incrementando las capacidades cognitivas y emocionales, la armonía y la posibilidad de estar atentos.
Al desarrollarse la capacidad de observarse, aceptando lo que ocurre sin juzgarse, el individuo se convierte en testigo de sus propias acciones y de su propia vida. Al ser un observador más agudo, desprejuiciado, le permite llegar a un conocimiento más profundo de sí y del otro.
Principios de la Eutonía
Los principios constituyen herramientas metodológicas para ser utilizadas en las clases o sesiones que posibilitan al alumno recuperar la fluctuación del tono.
Tales principios son:
toma de conciencia de la piel
toma de conciencia del espacio interno del cuerpo
toma de conciencia de los huesos
el contacto consciente (conciencia del espacio magnético que rodea al individuo)
experiencia del transporte (reflejo consciente del enderezamiento)
"repousser" (rechazar-empujar)
movimientos activos y pasivos
micromovimientos (movimientos de descompresión articular)
posiciones de control (secuencias de movimientos que permiten evaluar el estado de flexibilidad muscular)
movimiento eutónico
vibraciones (vocales y óseas)
La eutonía propicia la toma de conciencia y la regulación de la función tónica, a través del desarrollo del individuo como auto-observador. Se vuelve posible entonces detectar fijaciones en zonas que perdieron la capacidad de fluctuar en su tensión de base.
La Eutonía en América Latina
La propia Gerda Alexander introduce la disciplina en América Latina por medio de dos viajes que realiza a Buenos Aires en la década del '70, en los que brinda diversos seminarios y conferencias. Entre los participantes en esta experiencia se encuentra Berta Vishnivetz que se traslada a Dinamarca para continuar su aprendizaje con Gerda. Se gradúa allí en 1974, además de obtener títulos de magister y doctora en psicología mientras se desempeña como colaboradora de Gerda.
Berta Vishnivetz alterna su permanencia en Dinamarca con la dirección de la Escuela Latinoamericana y Argentina de Eutonía, que funciona simultáneamente en Buenos Aires (Argentina) y San Paulo (Brasil). Realiza en ambos países varias formaciones de eutonistas, las cuáles a pesar de desarrollarse en el ámbito no oficial obtienen un reconocimiento social como resultado del esfuerzo de los eutonistas para institucionalizar este campo. En el caso de Argentina en particular, la eutonía logra integrarse de manera diversa en ámbitos como la salud y calidad de vida, el arte y la educación, donde es objeto de estudio en distintas universidad e instituciones de nivel superior.
En el año 2005 comienza su funcionamiento en Buenos Aires una escuela de formación de eutonistas con reconocimiento oficial del Estado, tratándose de la segunda en el mundo con esa característica (después de la escuela alemana).
Alexander, Gerda (1979), La eutonía; Un camino hacia la experiencia total del cuerpo, Buenos Aires: Paidós.
Alexander, Gerda (1981), Eutony; The holistic discovery of the total person, New York: Felix Morrow.
Vishnivetz, Berta (1994), Eutonia; La Educación del Cuerpo hacia el Ser, Buenos Aires / Madrid : Paidós.
Odessky, Alejandro (2002), Eutonía y Stress, Buenos Aires: Lugar Editorial. 950-892-164-1.
Kaplan, Frida (2004), Salud y bienestar a través de la Eutonía (dvd), España - A.C.T.A..
Kaplan, Frida (2006), Embarazo y nacimiento eutónico, Método Frida Kaplan, Buenos Aires: Ediciones B.
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